| jueves, 16 de agosto de 2007 | 23:01


COMO LÁGRIMAS EN LA LLUVIA

Yo he visto cosas que vosotros no creeríais, me dice el replicante demasiado humano de Blade Runner, Roy Batty, interpretado magistralmente por Rutger Hauer. Mi sosias de pelo platino me cuenta que ha visto atacar naves en llamas más allá de Orión, rayos C brillar en la oscuridad cerca de la puerta Tannhäuser, pero yo, sin inmutarme, me siento a su lado y le paso mi brazo por los hombros: ¿sabes lo que he visto yo, Rutger?, le digo, yo en una sola semana he visto un campeón del Tour, que no ha protagonizado ningún caso de dopaje y que no tiene que exculparse de nada, y aun así es perseguido y carece de equipo para continuar su carrera; un escritor polaco que está siendo juzgado como autor de un crimen real que describe en una novela llamada Amok; a un vicealcalde italiano pedir una limpieza étnica de maricones en su localidad; a un abogado montando un espectáculo abracadabrante proclamando la inocencia de un tal El Solitario, a base de decir que luchaba por la liberación del pueblo español y que robaba a los bancos para dárselo a los pobres, a lo Curro Jiménez, y que incluso se estaba dejando crecer las patillas. Espera, no sueltes la paloma que aún he visto más cosas: una orden secreta de la Stasi autorizando a las brigadas que custodiaban el muro de Berlín a disparar a todo bicho viviente que intentase cruzarlo, incluidos mujeres y niños; que Castro ha esquivado 167 atentados y que un hijo de Pinochet ha sacado a la venta los trajes de su padre; que los clubes españoles de fútbol llevan gastados en fichajes 413 millones de euros, y que el Madrid ha hecho uno de 30 millones por un señor que se llama Pepe; que el golfista estadounidense John Daily, para no ser menos, confiesa en sus memorias que ha perdido unos 50 millones de dólares en los casinos. Tranquilo, Rutger, no me mires así que yo también estoy asustado y todavía queda: unos rusos plantando una bandera a cuatro kilómetros de profundidad bajo el Polo Norte, a fin de reclamar la soberanía de las riquezas naturales que allí había, y que resultó ser un tongo a base de escenas amañadas de la película Titánic; que en nada nos ponen un hotel orbital y podremos tomarnos los croissants mientras vemos ponerse el sol quince veces al día; que tendrías que ver lo buena que está Joanna Kruppa, la supermodelo que protagoniza la última campaña contra el uso de pieles, aunque luego seguro que le podrá el mono y se comprará algún abriguito; que ardió Roma otra vez en Cinecittá; que el fundador de Ikea nunca viaja en primera y que repone las botellas de agua del minibar con otras que compra más baratas; que hace un siglo en la India había más de 40.000 tigres y que hoy en día no habrá más de 1.500; que, al parecer, Second Life se está quedando vacío, la gente entra, pasea, se aburre y se larga; que Mattel va a retirar 18 millones de juguetes fabricados en China por riesgo para la salud de los tiernos infantes; que en el Ártico el hielo retrocede 20 kilómetros al día... Que sí, que sí, Rutger, que ya sé que te acabo de joder la escena, pero no pasa nada, hombre, suelta ahora la paloma y no te agobies, porque ya sabes que todos estos momentos, los tuyos y los míos, se perderán en el tiempo como lágrimas en la lluvia.

1 comentarios:

Portarosa dijo...

Genial.

Me alegro de la recomendación de Santos Domínguez.
Un saludo.