Si Bach es Dios, éste es su profeta.
Minutos musicales-Georg Philipp Telemann
De IGNACIO DEL VALLE | martes, 1 de septiembre de 2009 | 0:01
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Si Bach es Dios, éste es su profeta.
Los demonios de Berlín SEGUNDA EDICIÓN
CAPÍTULO INÉDITO AQUÍ
http://www.elpais.com/articulo/portada/montana/huesos/elpepusoceps/20100808elpepspor_4/Tes
SERIE ARTURO ANDRADESERIE ARTURO ANDRADE
Frente de Leningrado. 1943. En medio del Hades helado que fue el frente ruso, la División Azul se encuentra atrapada entre el Ejército Rojo y la Historia. En este escenario hallan el cadáver de un soldado degollado, enterrado hasta la cintura en medio de un lago helado, con una misteriosa frase grabada en el pecho MIRA QUE TE MIRA DIOS. Arturo Andrade y el sargento Espinosa serán los encargados de ir desatando los nudos de un crimen que les conducirá, entre más cadáveres envueltos en sangrientos rituales, a un lugar desquiciado donde reina el vacío, el absurdo, el horror... los emperadores extraños.
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2 comentarios:
Hola Ignacio,
Indiscutible belleza la de la música de Telemann, con la perfección contrapuntística del barroco. Un periodo que para mí es el delirio musical, y como ya te he dicho, Bach, Dios para mí. Con permiso de lo que debo a Chopin, por deformación pianística, pero al fin y al cabo, Dios es Dios, y Bach es el MÚSICO por excelencia. Con mayúsculas. Y fue reconocido en su época, no como se suele decir, aunque no con la dimensión que alcanzó luego. A Telemann, que fue contemporáneo, le tocó más la lotería de la fama en su momento. Productivo el tipo, a más no poder. ¿Puso el tiempo a cada uno en su lugar?. Yo creo que sí. Que el tiempo es un buen juez, y pone a cada uno en su lugar.
Adoro el sonido de la viola. Bellísimo concierto el que propones. De hecho la viola es mi favorito de los instrumentos de cuerda, uno de los que desearía para el fruto de mi vientre. El piano, lo justo, si lo puedo evitar. El sonido de la viola, más grave que el violín, es fantástico, aunque no hay una riqueza de obras compuestas para este instrumento comparable a la del violín, ni por supuesto, a la del piano. Si te gusta la viola, Ignacio, “Die Bratschensonaten”, de Johannes Brahms, maravillosas. Te lo digo, auf Deutsch, que te mola mucho. En tu columna, si no nos suelta una “germanada”, parece que no te quedas a gusto. ¡Uy!...que se enfada, :-).
De las anteriores Sonatas para Viola hay una versión extraordinaria de Pinchas Zukerman (también violinista) y Daniel Barenboim en el sello Deutsch Grammophon.
Abrazos, Ignacio. Muchos abrazos.
Genial. Se trata de pura literatura y viceversa. La extensión de la razón, la memoria, los sentimientos...
Me alegro de haberte vuelto a encontrar por aquí.
Un saludo, Ignacio.
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