Señores, a partir de ahora mis reseñas literarias y mis artículos en el diario Panamá América los colgaré en Facebook. Hoy tocan Jean Daniel y Glenn Gould, respectivamente, además de un pequeño homenaje a Berlín por el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia.
Por cierto, dicen que hay indexados unos 112 millones de blogs, así que gracias por visitar el mío. Muchas.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
21 comentarios:
Ignacio, una cosa es la abundancia de "blogs", y otra cosa es que sean dignos de ser visitados.Lo de Berlín lo encuentro merecido, soportar el nacimiento de los nazis, los bombardeos de la octava fuerza aérea, el rodillo sovietico en los últimos dias de la guerra, la división de la ciudad, el bloqueo sovietico y ser referente de la cultura Europea, todo ello en apenas cincuenta años tiene mérito.Yo también, como dijo J.F. Kennedy, soy Berlinés, si es que se puede ser de álguna parte.Esperemos que los berlineses futuros sean dignos de este legado, y no dejen que ese poso maravilloso que tantas generaciones han acumulado en esa ciudad se estropee.
Hola Ignacio,
Ya imagino que estás harto de la pregunta, pero tu cariño por Alemania y el conocimiento de su cultura (también del idioma?) de dónde se nutre?. Orígenes familiares, colegio alemán de pequeño?. A mí me encanta el idioma, la forma en que suena, yo creo que me recitan la guía telefónica de Berlín y me gustaría!. Pero no me decido a ponerme a estudiar porque el escaso tiempo del que dispongo debería utilizarlo en preparar el proficiency en fin, lo de siempre, entre el love y el must.
Hola de nuevo, Ignacio,
¿De veras hay tanto blogs?. Pufffff....Pues vaya pereza leerlos. De momento, me quedo en este, si puede ser. Estoy a gusto. Aunque leo de pasada algunos que emiten opiniones de mi rama de conocimiento, pero no se puede participar en todo. Hay que currar, y eso es lo que tengo que hacer por doquier estos días.
Respecto a la entrada anterior, Hombres de Estado, chapeau una y mil veces, Ignacio. No podría estar más de acuerdo. Sobran políticos de determinada calaña, de un partido u otro.
Como devota practicante de la religión liberal, seguramente más que de la católica, aunque no son incompatibles, respeto todo tipo de opiniones, me gusta escucharlas y entiendo que han de ser defendidas de la manera que lo han de ser. Utilizando las instituciones y la palabra. Los de ETA, esto no lo tienen claro. Cada uno es libre de defender lo que quiera, lo que considere correcto. Como economista yo defiendo y creo en el sistema que mejor funciona. Los investigadores en Economía no tenemos conejillos de indias para poner en práctica algunas tesis. Tenemos la realidad. Lo que funciona y lo que no funciona. Pero es que hasta la realidad nos da pruebas de ello. Basta ver lo que sucedió con la evolución de Alemania occidental y oriental tras la segunda guerra mundial. O las dos Coreas. El socialismo ha demostrado a nivel económico ser un fracaso como sistema frente a la economía de libre de mercado. Y si hubiera otra mejor que ésta última me apuntaría, pero los economistas liberales de momento no la conocemos; en cualquier caso, si aparece, la veremos antes que los que viven con orejeras, a todos los niveles. Sólo hablo de consecuencias y efectos económicos, que es para lo que estoy capacitada, supuestamente. Pero ¿qué hay de los otros efectos?. Mi cinéfilo favorito me ató a un sillón para ver “Das Leben der Anderen”. Un millón de gracias a él. Archirecomendable. A un buen hombre, siempre le tocaría yo una sonata, como la que toca el escritor progatonista en la peli....Para un derroche explicativo de las consecuencias de ese sistema (como de cualquier otra dictadura, por otra parte), película imprescindible. A nivel social, humano, .... Soberbia película. No hay nada más que añadir.
LIBERTAD. De veras que hay muchas cosas que soluciona la libertad. Y buenos hombres de Estado, que crean en ella. Por supuesto. El Estado es necesario, también para los liberales.
¡Vaya por Dios, que como no estoy en Facebook me voy a perder la puesta al día!. El otro día me escribió una chica, que no conozco, para que me uniera al grupo y fuera su amiga. Pero ¿de qué me conoce?. ¿Para qué me quiere ahí?. De momento, paso. Un tema de tiempo (entre otras cosas) y como decía Groucho, nunca formaría parte de un Club que me admitiese como socio. Excepto el Marfil de la Torre. Para todo hay excepciones, también en los blogs que no vale la pena leer, y menos participar.
Por cierto. La “Semana Negra” de los “Volkswirtschaftleren” españoles ha venido y se ha ido, y nadie sabe como ha sido. Ni se enteraron en el lugar de autos. Los “ORCOS”, como tú dices, Ignacio, también nos reunimos, ¿sabías?. Sin hacer ruido y sin molestar a nadie. Ni siquiera a nosotros mismos, si una ponencia no nos gusta o no nos parece interesante, no lo decimos. Mutismo. Silencio absoluto. En mi campo, ser ignorado es lo peor. Por eso me dan un poco de pena los blogs en los que no hay comentarios o posts, como se dice. Sin embargo, cuando te fríen a preguntas hacen suyo tu trabajo, porque les interesa y todo ayuda a incrementar el saber común, que es de lo que se trata. Los comentarios negativos y, por supuesto, las descalificaciones, están de más entre la gente estudiada, cultivada y bien educada. Ya sean académicos o burgueses. Porque hacerlo es sencillamente caer bajo, muy bajo, bien se sea, alto o bajo.
Abrazos, Ignacio. Muchos abrazos.
Libertad, mais pour tous... No es que pase lo que decía Condorcet (que no era comunista, como tampoco lo soy yo, ni lo era Olof Palme): que los privilegios de la aristocracia del dinero sustituyan los de la aristocracia de cuna...
Y eso sin hablar de que el planeta ya lleva bastante tiempo llamando nuestra atención al hecho de que el sistema de producción cuyo objetivo es crecimiento imparable -una premisa que, por cierto, compartía el capitalismo con la economía de los régimenes comunistas- hipoteca no solo nuestro bienestar, sino incluso nuestra mera existencia...Y eso me parece que muchos economistas liberales -que no todos, obviamente- prefieren ignorar.
Un abrazo a todos los debatientes. Y enhorabuena, Nacho, por irse convirtiendo poco a poco en un opinion-maker, además a nivel internacional. Que bien. :-) d.
Resulta que ese sistema cuyo objetivo es crecer, crear riqueza, es lo que ha permitido que hoy, alguien de la clase media, viva en muchos aspectos mejor que los Luises franceses. Gracias a la mejora tecnológica, por otra parte, a la cual precisamente ese sistema ayuda enormemente. Para un economista cualquiera, keynesiano o de la rama que sea, crear riqueza o al menos, ayudar a erradicar la pobreza de este mundo debiera ser un objetivo básico. Para los ateos o no practicantes de la religión liberal, lamento decir que permitir que Africa entre en ese sistema, es sin lugar a dudas la mejor manera de ayudar a salir adelante a ese continente que sangra. Podría poner unos cuantos ejemplos de otros países que lo están logrando y mencionar literatura económica al respecto, pero no tengo tiempo.
Nadie dice que el sistema sea perfecto, pero es lo mejor que tenemos.
En cuanto a lo que cada uno se quiera hipotecar su existencia, allá él. Los propios límites y el sentido común también son básicos para poder disfrutar de libertad; sin ellos, de hecho, no la hay.
Entonces habrá que predicar con el ejemplo: ¿porqué no quitar las subvenciones a los agricultores españoles y franceses y abrir las fronteras a los productos agrícolas de fuera? O es que nuestra "religión liberal" es tan selectiva como la inglesa del XIX, cuando Inglaterra se dedicaba a abrir mercados ajenos a cañonazos para inundarlos de sus productos, destruir las industrias locales y sacar de allí la materia prima, mientras las fronteras de la Albión estaban bien protegidas por las barreras aduaneras para los productos fabricados. ¿O es que la guerra es la continuación de la economía por otros medios?
;-) d.
Normalmente prefiero que un debate serio se desarrolle en un tono menos irónico, pero creo que de todos modos éste no es el lugar adecuado. Así que muchos abrazos a todos, especialmente al dueño del blog por aguantar, y hasta otro día.d.
Con el permiso del jefe del blog, y sin querer entrar en más debates porque tal vez no sea el lugar para ello, te aseguro Darina que soy la primera en defender que se abran las fronteras, en la reforma o anulación de la PAC; no se pueden subvencionar las vacas euoropeas como para tenerlas en hoteles de 4 estrellas.
Por supuesto que hay que hacer debates serios; y te aseguro que mi defensa del sistema liberal es de lo más serio; lo cual no quiere decir que se puedan exponer argumentos con más o menos ironía o sentido del humor....Lee a Xavier Sala i Martín; es un buen reflejo de ello. Cuando sea mayor y economista, quiero ser como él.....Creo que ya no tiene remedio.
Con respecto a esta interminable discusión, bienvenida sea, porque el debate abierto siempre aporta un poso de ideas válidas, tanto de un lado como de otro, quiero aportar mi grano de arena.
Si realmente existe sensatez en la clase politica que nos gobierna, y a veces nos asfixia, el mundo que emergerá tras la crisis que nos azota será algo diferente al que conocemos.Hemos alcanzado los limites del "desarrolismo", teoria que entra dentro de los planteamientos de la economia de libre mercado y también en la teoria marxista, aunque parezca un contrasentido.
La solución para el sistema capitalista no será la misma que en otras crisis, dar credito ilimitado para fomentar el desarrollo, sencillamente nos hemos cargado el credito disponible y debemos más dinero que todo el circulante mundiál junto.
Ni la teoria socialista de desarrollo común para todos, porque sencillamente, para el sistema socialista, algunos son mas "todos" que otros.
Hay que abrir una tercera via que asegure un cierto bienestar para los productores de materias primas, que casual y desgraciadamente son los paises del tercer mundo, y a la véz, permita un adecuado desarrollo sin despilfarro para los paises industrializados del norte.Habrá que pensar en vivir de acuerdo con nuestras posibilidades, ser un poco más humildes y ajustar nuestro ritmo de vida sin falsas espectativas, buscar el bienestar común sin pisotear los recursos y los derechos de los demás fuera de nuestro norte del bienestar, porque de lo contrario, los pobres del súr seguirán jugandose la vida para llegar a nuestras costas, dejando sús paises en manos de élites corruptas e ineficaces que malbaratarán el futuro de sús paises.Adiós a los vuelos baratos que nos llevan a pasar un fín de semana en la otra punta de Europa.Adiós a ese pesado 4X4 que nos parece más comodo y seguro y con el cuál podemos sembrar el pánico en la autopista, a costa de unos consumos de combustible exagerado y un desperdicio tremendo de recursos.Adiós a las cerezas importadas fuera de temporada, traidas hata Europa a costa de un transporte caro y despilfarrador.¿Realmente estamos dispuestos a renunciar a estas prerrogativas?.Por el bién de todos, espero que sí.
Para anónimo, pues lo de Alemania siempre fue un amor a primera vista. Me gusta todo, su cultura, su paisaje, su forma de ver el mundo... No sé, es lo que hay. ¿Buscas razones cuando te cuelgas de alguien?
Para el resto de participantes en este duelo incruento: impresionante el nivel. Así da gusto.
Y en lo que respecta a los académicos, querida Marfil, aquel artículo no era exactamente refiriéndome a lo que tú piensas, es decir, aquel follón que hubo con la universidad, sino a ciertos escolásticos que creen que la crítica es más importante que la obra en sí -que hay muchos- y que terminan provocando que lo que no debería ser más que una nota al pie se convierta en una taxidermización en toda regla de la obra de arte, para luego alimentarse el resto de su vida del cadáver en congresos, ponencias, libros de ensayos, etc...
Señor del Valle, Vd. perdone mi mala interpretación de su escrito. Lo cierto es que me pareció que te referías a esa polémica, por otros comentarios que hubo en la prensa. En cualquier caso, para toda esa gente que se dedica a eso, pues peor para ellos. Yo creo que la crítica siempre ha de ser constructiva y añadir y aportar algo, a la obra de arte o a la obra científica. Vivir de ello, ser negativos y destructivos no creo que esté bien. Si quieres llamarles “orcos”, tú mismo. Tu sentimiento hacia ellos así será, pero es que ni lo merecen creo yo, una descalificación por tu parte. Indiferencia.....Ya se sabe que no hay mejor desprecio....Es lo que hacemos los académicos respecto a la gente o las obras que no nos gustan o nos aportan nada.
En lo sucesivo, trataré de interpretar mejor tus textos.
A Rodericus: siempre tan concilidora su visión. Llevas razón en buena parte, en otras no tanto. Con todo afecto, debes de ser muy joven (¿víctima de la Logse?, que dicen algunos), o seguro que más joven que yo y no te ha tocado repetir faltas en los Dictados. Espectativas, con S, un pequeño caos en la colocación de acentos (véz, súr.....). Cuando hago Tandem con alumnos extranjeros compruebo lo fácil que les resulta la colocación de los acentos, porque en nuestra querida lengua tiene unas reglas muy sencillas. El francés, por ejemplo, es horroroso, con tres tipos de acentos. Lo importante es el FONDO, y no tanto la FORMA. Pero ¡va!.....si te revisas algunas reglas ortográficas, no estaría de más....:- ) :- ).
Pido disculpas en cuanto a mi forma de expresarme por escrito, esto delata mi origen, el mundo de la ingenieria, y allí los errores que vigilamos son numerales, una coma mál colocada en una fracción, y zás, un viaducto flamante y nuevo que se derrumba sobre la cabeza de algún inocente que pasa por allí en se infausto momento.
En cuanto a mi juventud, quizás sea joven de espiritu, la gente que me educó me inculcó un cierto inconformismo irredento, pero los cuarenta ya no los cumplo, y ya no llevo la cuenta de mis canas.
Y no, quizás no me iria nada mál colocarle al equipo uno de esos absurdos correctores ortograficos que a veces señalan más errores de la cuenta, el origen anglosajón de sus programadores les delata, pero me resisto a ello, la perfección me irrita profundamente, borra todo signo de humanidad.Me gustan las imperfecciones, tanto en las personas como en lo que nos rodea, siempre me dá la esperanza de que podemos mejorar un poco más, ¿ ó quizás no ?.
Bueno, Rodericus. Equivocada ando yo. Soy más joven. Aún no he cumplido los 40 y no tengo canas.
El corrector automático, lo quité. Me sacaba de quicio; pero no puedo evitar ver las faltas de ortografía, aunque también soy de números. Y cuido las comas en las fracciones. Y desde luego no soy perfecta, aunque lo que puedo mejorar, lo intento, y lo que no, es decir, mis carencias, las acepto.
Es cuestión de voluntad. En cualquier caso, veo que aceptas las críticas con deportividad.
En cuanto a lo de que los ingenieros no se preocupen por las faltas de ortografía, o los acentos, pues ¡qué quieres que te diga!. Estoy casada precisamente con uno que antes se muere que poner un acento donde no toca, y que me ha enseñado mucho, no sólo de números, sino sobre todo de cine y literatura.
Si se lee mucho, ya se sabe...
Espero no haberte molestado con mi comentario.
Así que ingeniero...Adoro a los ingenieros, aunque en los últimos meses paso demasiado tiempo con ellos, con los muertos, para que quede claro.
Por el resto, muy de acuerdo en todo, rodericus. No entiendo porque se saca a relucir el comunismo siempre cuando alguien haga una critica constructiva al funcionamiento del sistema actual ;-)
Y en cuanto a los accentos, tengo que confesar que no me molesto con ponerlos cuando estoy perdiendo tiempo en internet ;-) d.
Lo del comunismo, bueno, sencillamente ninguno de los dos polos ha demostrado ser fuente de estabilidad y sobre todo, de humanidad con los sufridos gobernados, no sé muy bién que es peór, morir de un infarto en EEUU por falta de mutualidad médica, o morir de un infarto en Corea del Norte por inexistencia de médicos.Tiene que existir un sistema intermedio, que prime a los emprendedores y al talento, pero que evite muertes por miseria en los suburbios de los extrarradios y que el sistema de libre mercado nos trate como ganado, que cuando deja de ser productivo acaba en la antesala del matadero.Vivo en el area metropolitana de Barcelona, y aquí convive el lujo, incluso el despilfarro absurdo, con gente que espera el cierre de los supermercados para llevarse a casa los alimentos caducados ó pasados.Como todo jóven en los setenta,fuí un izquierdista radical, casi un nihilista, evolucioné hacia posiciones mas centradas, creyendo que en el equilibrio estaba la virtúd, y que el tiempo estaba de mí parte.Que dando más bienestar y sobre todo, más formación y cultura a los que venian trás mí, este lugár podria ser más humano, y que todo el mundo tendria una oportunidad.Pero me equivoqué, y ahora mismo el panorama es tan tétrico como en los setenta, pero sin la ilusión y las ganas de cambiar el mundo que entonces sentiamos los jóvenes.Y estoy recuperando aquél nihilismo.
Hemos cambiado la guerra de Vietnam por la de Afganistan,y en el fondo los muertos siguen siendo los mismos, los que pasaban por allí desarmados e indefensos.Pero siempre nos quedaran los viejos himnos, aunque nadie cante ultimamente La Estaca.
Oh, espero que nadie lo interprete como que te estoy tirando los tejos, pero no sabes cómo me gusta tu último post, rodericus. También creo en una actitud activa hacia el mundo que nos rodea. Me parece que hay que recuperar el control democrático de la economía, bueno, y de todo, viendo el panorama caciquil neofeudal que nos rodea. No me convence la fe ciega, diría medieval, en las fuerzas del mercado automáticamente bondadosas, que además en la práctica no tienen la vía libre en ningún lugar del mundo. Y para que quede claro, no defiendo como alternativa el capitalismo del Estado dirigido por tecnócratas, tipo régimenes comunistas de la segunda mitad del XX, igual de destructivo hacia el medio ambiente como el capitalismo sin más de hoy en día. No sé si conoces Hervé Kempf: Comment les riches détruissent la planète. Lo recomiendo.
Bueno, pero sobre todo me parecería bien que salieramos de nuestro aislamiento hiperindividualista y recuperáramos un poco la vida en la comunidad y para la comunidad. Para empezar no estaría mal.
Y aunque la razón me tira hacia el nihilismo, el corazón me guía hacia el existencialismo camusiano...No es una mala manera de sobrevivir ;-)
Abrazos.dar.
Mea culpa, incluso yo, que soy individualista irredento que me creo el mito de la voluntad nietzscheano y la mitologia del impulso hacia el oeste de los gringos, me estoy dando cuenta que hay que pensar ya un poco en comuna.
Ignacio, nos parece bién que sigas el consejo aquél de : "Al oeste, vaya hacia el oeste, jóven".
Pero no se te ocurra creerte el de :"El destino manifiesto", porque desde entonces los yanquis, salvo honrosos parentesis, nos han metido en cada fregado.....
Saludos.
Querida anonima ;-), gracias por tú elogio.He echado un vistazo por encima al trabajo de Hervé Kempz desde que lo citaste.No lo conocia, pero coincido con él en gran parte de su planteamiento sobre el sistema liberál de mercado.
Este está abocado a una superpoducción masificada para que sea una fuente de riqueza para sús patronos, a costa de esquilmar rapidamente los recursos disponibles malabaratandolos para saturar los mercados.He llegado a la misma conclusión desde mi pequeña trinchera en el sector industriál catalán.
Y me gusta tú idea de refugiarnos en el existencialismo.Aferremos cada momento de belleza, placer y bienestar que nos dá el dia a dia, porque el futuro es un lugár denso y sobre todo, obscuro.Brindo por todo ello con una cerveza fria mientras escucho a Piáf en "L´Himne a L´Amour"
Publicar un comentario