La feria hace extraños compañeros de cama, esta vez me ha tocado Boris Izaguirre. Majete, el tío. Por otro lado el calor continúa tostándonos y estoy cogiendo hasta color. Muchas gracias a la gente que se acercó para firmar los libros. Conocen a Arturo Andrade y conocen la Historia. Agradecido.
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4 comentarios:
Compañeros de cama, ehh??
He oido algo de una película y una novela tuya, que hay de cierto???
Umm... yo nunca vendo motos, la gente que me conoce lo sabe. Un proyecto que ha tardado dos años en hacer el guión da una idea de su solidez. Que se tuerza o no eso ya no depende de mí.
Abrazos
Estuve en la Feria del Libro de Madrid en junio de 2005 cuando fui a examinarme del título del CELI (Certificato di Conozcenza della Lingua Italiana) en lo que era la Embajada italiana. Luego me paseé por la Feria. Me divertí. No te vi.
Espero que hayas firmado muchos libros, y que las firmas vayan correlacionadas con el número de ventas de tu nueva novela.
En cuanto a lo que dices de “extraños compañeros de cama”, Boris Izaguirre y tú, pues qué quieres que te diga, Ignacio. Creo yo que eso dependerá del punto de vista de cada cual. Estableciendo el supuesto, no sé si del todo correcto pero seguro que no demasiado alejado de la realidad, de que un chico culto, de buena cuna (en su caso venezolana) con buen gusto y homosexual tenga los mismos gustos que una chica culta, de buena cuna, con buen gusto y heterosexual, me temo yo que tú, a él, no le resultas un extraño compañero de cama. Noooooooo, ¡qué va, hombre, qué va!. Más bien un deseable y atractivo compañero de cama. ¡Ay, bueno!. Se me olvidaba que ya tiene marido. ¡Qué cosas pasan ahora!. Te libraste. En fin. Dejando las cosas bien claras al inicio de la Feria, no le veo mayor problema a compartir espacio de firmas con Izaguirre, máxime si dices que es majo. Siempre me lo ha parecido, la verdad, en tertulias y demás. Sin asimetría informativa, no problem. La asimetría informativa es un problema recurrente, así como una hipótesis subyacente en buena parte de las tesis que hacemos en Finanzas.
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Aunque nunca se sabe, Ignacio, nunca se sabe.... Imagínate que te quedases cuatro años encerrado en la Feria del Libro, y todos casualmente fuerais escritorOs, ninguna escritora. Tal vez agradecieras que fuera Boris tu compañero; parece muy delicado. Te supondría yo en el rol activo. Lo digo yo, porque en “El tiempo de los emperadores extraños”, la verdad es que me sorprendió el relato de las prácticas, en prisión, de Arturo Andrade (que no necesariamente es Ignacio del Valle). No tengo aquí el libro, para indicarte la página, pero sabes que lo haría. Me sorprendió; no puedo negarlo. Bueno, la sexualidad de cada uno es, eso, de cada uno. Y esa era, la de Arturo Andrade....
Hablando de homosexualidad y orgullo de la misma, ¡vaya pijada lo del día del orgullo gay! ¿verdad?. Día no, semana. ¿Y para qué tanto alboroto?. ¿Es necesario?. Mucho ruido......Está claro que, hoy día, cada uno es libre de hacer en su casa lo que le de la gana, con quien le de la gana, pero como decía la señora del juicio de Wilde, sin asustar a los caballos, o a los niños, o a las ancianas que entran en el portal y que vienen de la compra y que declaran, que les parece bien pero que se ven cosas que no se deberían ver. ¿Porqué?. ¿Para cuando el día del orgullo heterosexual?. Para nunca, please, para nunca espero yo. Ese es un orgullo que sólo les pertenece a un hombre y a una mujer, que están tan orgullosos y felices de haberse encontrado que si tuvieran que decirlo al mundo, se ruborizarían. Hablo de los que tienen suerte, toda la suerte posible, y que a veces, cuando están a solas, necesitan pellizcarse para saber si es cierto o si se lo terminan de creer.
Pues yo, imaginándome en tal situación, cuatro años encerrada, la verdad es que, caso de tener una calentura de entrepierna irremediable, creo que antes de hacerme un bollito con mi compañera de celda, trataría de camelarme al funcionario de prisiones, aunque fuese barbudo y barrigón. Incluso, tal vez, si me emplease a fondo, podría conseguir yo algún pequeño beneficio penitenciario. No gran cosa, dados mis escasos recursos. Tal vez, una ración más de postre, un paquete de cigarrillos para mi compañera de celda que seguro que me sale fumadora, un día más de permiso....Intercambio económico de sexo...Mala mezcla, pero si a mi antepasada, una de las putas más caras de la historia, semianalfabeta, chapurreando el francés le salió así: joyas a gogo, mansiones, hasta una isla.....tal vez yo, que tengo algo más de letra aunque seguro que menos “artes”, sacara alguna cosilla. Puta, lo que se dice puta, no es lo peor que se puede ser; de hecho ninguna mujer sufre penas de reclusión mayor por ello. Tampoco por abortar, por no haber querido, voluntariamente, o no haber podido (llámase aborto espontáneo) traer una nueva vida, ya iniciada, a este mundo. No necesitan prisión esas mujeres. En el pecado, llevan la propia penitencia.
En fin, yo creo que en mi caso, encerrada, al final, nada de nada. Ni con mi compañera de celda, ni con el funcionario de prisiones. Entre otras cosas, porque según quien se sea, la calentura de entrepierna irremediable no existe. Creo. Me dedicaría a leer, y a ser libre y feliz con mi imaginación. Creo que la mejor salida para una liberal entre rejas. Las de la cárcel u otras.
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