| martes, 4 de marzo de 2008 | 12:19


LAS COSTURAS DEL MUNDO
Un sastre judío necesitó mes y medio para confeccionar unos pantalones, y recibió la airada visita de su cliente: mes y medio para hacer unos pantalones, se quejaba el cliente cuando se los entregó, cuando Jehová hizo el mundo en una semana. El sastre abrió la ventana y abarcando el mundo con un gesto, lo compadeció un pelín desdeñoso: mire usted ese mundo, dijo, y luego señaló los pantalones con orgullo y exclamó, y mire usted esos pantalones.